La atención a la diversidad como eje vertebrador de la educación secundaria

La atención a la particularidad que cada individuo muestra al momento de aprender ha sido durante mucho tiempo de la preocupación de aquellos dedicados a la educación, si bien es cierto que existe una gran cantidad de estudios y teorías al respecto es la corriente constructivista la que tiene como eje vertebrador la atención a la diversidad de los alumnos.

 

El constructivista como corriente pedagógica tiene una visión del alumnado como generador activo de su propio aprendizaje, en el que el docente juega un papel indispensable como el sujeto que propone las estrategias que se adapten de la mejor manera a las diferentes formas de aprender de los alumnos; el trabajo del docente es conocer su grupo, conocer las particularidades de sus individuos y actuar en función de sus necesidades educativas.

 

Considerando lo antes dicho se encuentra en la enseñanza adaptativa – la diversificación de los procesos de enseñanza que permite que los alumnos alcancen los objetivos previamente establecidos por el curriculum – como la respuesta a lo que el constructivismo plantea, la atención a la diversidad entendida en todo momento del proceso enseñanza-aprendizaje y no solo como destellos de esfuerzo y planificación en momentos determinados del proceso.

 

Este proceso de enseñanza- aprendizaje comienza desde la concepción previa de los temas con la que los alumnos cuentan, de ahí el profesor planea y adapta las estrategias a sus alumnos para que ellos construyan nuevos conocimientos que les resulten significativos, estos conocimientos significativos no son arbitrarios sino se convierten en parte de las estructuras mentales que el alumno asimila y entiende, dependen de tres requisitos , dos ligados al alumno:  significatividad lógica (cada asignatura tiene su propia estructura), significatividad psicológica (Cada alumno tiene una lógica que se debe respetar) y su motivación (la cual se ve exclusivamente afectada por las razones que el alumno tenga para aprender o no un contenido ya sea por decisión propia o por la influencia del medio), una vez que el maestro observa los resultados reflexiona y modifica su plan de acción en función de mejorar las aéreas de oportunidad este proceso es constante y está presente en cada nuevo tema, conocimiento o competencia a desarrollar.

 

Algo fundamental es la comprensión de los estilos de aprendizaje, el tipo de estrategias que más aporta en la construcción de cocimientos significativos por parte del alumno.

Como se menciono antes aunque el alumno se considera como fuente fundamental del proceso de enseñanza- aprendizaje no es ni el único ni el más importante, para que dicho proceso se lleve a cabo de la forma esperada es indispensable que tanto el alumno, el docente y el objeto trabajen de forma equilibrada y en función del aprendizaje para que los objetivos se logren en mayor o menor medida a lo esperado.

 

Sin embargo el hecho de que la enseñanza constructivista sea de atención individualizada no significa que los compañeros no sean parte importante del aprendizaje del alumno, por el contrario el docente puede y debe utilizar el trabajo colaborativo como un instrumento de apoyo en el que incluso desde un punto de vista podría verse como una atención más personalizada de los alumnos.
Intenciones educativas de la etapa secundaria y diversidad de los alumnos: capacidades, intereses y motivaciones.

 

Durante la escuela secundaria nos encontramos que los alumnos en búsqueda de su identidad, tomando formas de vestir o de comportarse como aquellos por los que sienten admiración y de cierta forma son sus ideales a alcanzar, los adultos se convierten en enemigos y verdugos pero al mismo tiempo son indispensables para la autoestima de los jóvenes, buscan la independencia pero la aceptación de sus padres les resulta necesario.

Durante esta etapa el alumno desarrolla su capacidad de raciocinio, utilizando la lógica formal pasan de un pensamiento formal a un pensamiento abstracto, lo cual les permite obtener y aplicar lo que conocen ya no solo de forma  empírica sino con la capacidad de incluir sus explicaciones científicas de forma compleja y objetiva que va adquiriendo a lo largo de su educación escolar.

Su capacidad de pensamiento se ve altamente diferenciada de los niveles anteriores, tanto su forma de comunicación, la resolución de problemas así como el desarrollo de una moral autónoma las cuales se concretan en diferentes grados de complejidad  lo que hace más notable la diversidad de los alumnos.
La diversidad de intereses es observable en cada alumno algunos tienen intereses de índole social o algunos jóvenes con necesidades económicas están enfocados a lo laboral con el fin de mejorar su situación social, la autoestima o un auto concepto debidamente estructurado son diferencias en las que el maestro debe trabajar, una adecuada intervención de la educación puede apoyar a que los jóvenes controlen sus emociones y enfoquen sus intereses hacia la construcción de sus conocimientos.
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Referencia
Martín, E. y. (2001). la atención.La diversidad en la educacion secundaria . México: Porrúa.